Trazabilidad: ¿exigencia u oportunidad para el sector exportador?
La capacidad de conocer y certificar con precisión el recorrido realizado por un producto, desde su origen hasta su llegada al consumidor final, nació como una necesidad y hoy representa una posibilidad de conquistar nuevos mercados.
El mundo desde hace un tiempo viene experimentando cambios muy radicales y acelerados, dentro de éstos se pueden destacar la globalización de los mercados, la cual ha traído consigo un mundo de oportunidades para el sector exportador, principalmente a través de la firma de diversos acuerdos comerciales. Como es sabido, las exportaciones juegan un papel fundamental para la economía y el desarrollo de un país, es por ello que las empresas exportadoras latinoamericanas deben tener pleno conocimiento de todas las exigencias que deben cumplir antes de querer ingresar y conquistar nuevos mercados. Una de las más solicitadas y desconocidas es la trazabilidad.
La trazabilidad y su importancia en el comercio exterior
La introducción de la trazabilidad en el comercio exterior inicialmente fue en forma lenta, pero, en la medida que han ido pasando los años, fue tomando mayor fuerza e importancia debido a la promulgación de nuevas reglamentaciones, a la demanda de estándares de calidad y a la tendencia de los consumidores.
En base a lo anterior, el sector exportador debe comprender que, antes de exportar o ingresar a un nuevo mercado, debe cumplir con la aplicación de esta exigencia llamada trazabilidad.
A modo de ejemplo se pueden mencionar dos casos de éxito a nivel regional, los cuales le han sacado provecho a la aplicación de los sistemas de trazabilidad para convertirse en productores confiables y competitivos; ellos son los frigoríficos paraguayos para el envío de productos cárnicos, convirtiéndose en proveedores confiables y ganando cliente como el gigante del retail Cencosud de Chile; y por otra parte Perú, que se ha convertido en uno de los principales exportadores de espárragos en el mundo, gracias a su preocupación por mantener los altos estándares de calidad e inocuidad de esa industria a través de la aplicación de Buenas Prácticas Agrícolas (BPA), HACCP y de sistemas de trazabilidad.
En ambos casos, estos distintos sectores productivos, han tenido la capacidad de entender que la aplicación de la trazabilidad en sus empresas es una inversión que les ha permitido abrir y mantener mercados tan exigentes como el europeo, norteamericano o el japonés.
La otra cara de la moneda son aquellos países que están aun en un proceso de implementación a nivel nacional, como lo son Nicaragua y Tailandia, por mencionar algunos. Ambos países actualmente están entendiendo que sin trazabilidad el ingreso de sus exportaciones se ve complicado, perdiendo oportunidades debido a la falta de implementación y desarrollo de sus estándares nacionales que les aseguren a los importadores que sus productos son confiables y saludables para el consumo humano. Lamentablemente, hasta que no se regularice esta situación, dichos países estarán en stand by o verán disminuidos sus volúmenes de exportación a ciertos mercados.
Al mismo tiempo existen otros sectores productivos como el de la salud, que están aprovechando todos sus beneficios, como laboratorios, proveedores de medicamentos, clínicas, hospitales e instituciones públicas españolas. Es tal el grado de importancia que tiene la trazabilidad en España que, durante la FARMAtrack, más de ochenta representantes de oficinas de farmacias, distribución e industria, manifestaron su preocupación por la implementación urgente de un sistema de trazabilidad para dotar de mayores garantías de seguridad a la cadena de suministros farmacéuticos.
Este sector ve en la trazabilidad una vía segura de comercialización (nacional e internacional) de medicamentos en forma eficiente, donde se busca controlar las importaciones de materias primas para la producción de medicamentos y la exportación de fármacos en forma confiable y segura. De esta manera, su aplicación tendrá un efecto dominó directamente sobre los mercados paralelos de medicamentos, más específicamente, sobre la comercialización de medicamentos falsificados.
Las áreas del transporte y de la logística son otros de los sectores que le han podido sacar grandes beneficios, debido que, a través de ella, tienen la capacidad de realizar el seguimiento de la carga, gracias a la aplicación de diferentes herramientas tecnológicas de captura, ubicadas estratégicamente en todas aquellas unidades logísticas como cajas, bins, pallet o al mismo contenedor, en una operación de exportación.
Paralelamente, algunas instituciones públicas han visto en la trazabilidad una oportunidad para agilizar sus procesos operativos, como lo son los servicios de aduana, bancarios, de seguros y certificadores. Su aplicación en estos sectores es de forma electrónica, por parte de todas las instituciones involucradas en una operación de comercio exterior, destacándose el desarrollo de la “trazabilidad documentaria”.
Aplicar trazabilidad documentaria en una exportación es emitir y enviar simultáneamente el set completo de documentos (como la factura de exportación, packing list, pagos varios, certificados y visaciones) a todos los actores involucrados en el proceso exportador, incluyendo el importador. Esto hace que la operatividad carezca de trámites burocráticos, haciéndola rápida y eficiente, lo cual le permite al exportador tener la capacidad de administrar sus tiempos, evitando de esta forma, atrasos innecesarios que pueden llevar al fracaso de la operación e inclusive a perder el cliente en el exterior.
La trazabilidad documentaria cuenta con beneficios adicionales que se traducen en una baja de los costos fijos; como el no perder ninguno de los documentos involucrados en la operación de exportación, evita el almacenamiento de los mismos, no tener una persona para su entrega, etc. Claramente estamos en presencia de una herramienta de eficiencia operativa, que se reflejan en una baja de los costos de la empresa.
Algunas de las ventajas que entrega la trazabilidad al sector exportador:
– Capacidad de cumplir con una normativa internacional vigente.
– Permite tener el control de la información en toda la cadena de producción.
– Tener la capacidad de seguir paso a paso el proceso productivo en tiempo real.
– Optimización de los recursos de la empresa.
– Exportar productos de calidad, inocuos y confiables.
– Mitiga situaciones de crisis a través del retiro oportuno de los productos.
– Entregar respuestas precisas y oportunas a los importadores y consumidores finales.
– Herramienta de Marketing que permite diferenciarse de la competencia.
– Incrementa las probabilidades de cerrar nuevos negocios.
– Llave de ingreso a exigentes y competitivos mercados.
– Mejoramiento de la imagen comercial en los mercados internacionales.
Pero uno de los principales inconvenientes que han debido sortear los exportadores durante el período de adaptación, fue el de disponer y entregar la información requerida dentro de las primeras 24 horas desde el momento de su solicitud; para solucionar esta situación, los exportadores debieron ordenar en forma lógica toda la información recopilada e incorporar tecnología para poder cumplir con los plazos establecidos de entrega.
Es por ello que muchas compañías que desarrollan software de producción han incluido dentro de sus sistemas, un módulo de trazabilidad, tal como lo ha hecho la multinacional SAP, empresa líder en entregar soluciones de software empresarial. Esta compañía de origen alemán ha sacado al mercado dos herramientas denominados SAP Business One, que es una solución de gestión de negocio para Pymes que facturan hasta 50 millones de dólares anuales y la segunda, el SAP R/3 para todas aquellas que superan anualmente la cifra mencionada anteriormente. A modo de ejemplo de los efectos de esta herramienta, la empresa Comercial Scanavini Ltda. de Santiago de Chile, triplico en solo un año, sus exportaciones de cerraduras para puertas a los países de la región.
GS1, una organización de carácter internacional es quien lidera la aplicación de trazabilidad a través de la utilización de códigos de barras, es por ello que durante el mes de mayo de 2009, en Santiago de Chile, el país transandino fue elegido para desplegar la Asamblea anual GS1, a la que asistirán los máximos líderes mundiales del retail. Entre los temas a desarrollar estará la codificación uniforme a nivel mundial que permitirá poder leer toda aquella información proveniente de los diferentes países exportadores.
“La trazabilidad es una iniciativa que está adquiriendo mucha relevancia, día a día en todo el mundo, gracias a la creciente legislación para garantizar la seguridad de la cadena alimentaria o sanitaria” estas fueron las palabras de Miguel Ángel Lopera, Presidente y CEO de GS1 Estado Unidos; organización líder a nivel mundial en el desarrollo de estándares de identificación de productos.
Wal-Mart, Tesco, Carrefour o Cencosud, podrían llegar a ser uno de sus potenciales clientes en el mundo, pero ¿se encuentra preparada su empresa para cumplir con las exigencias de estos gigantes del retail? Si su respuesta es no, claramente estamos perdiendo una nueva oportunidad de exportar, ingresar y desarrollar un nuevo mercado. Sea pro activo, adelántese al futuro, y no espere que el importador de lo solicite, hágalo por iniciativa propia.
La Trazabilidad desde la óptica del consumidor
El consumidor de hoy día es muy exigente, especialmente con productos importados; siendo ellos los que tienen la capacidad de determinar el éxito o el fracaso de la permanencia de un producto en un mercado determinado. A ellos les interesa que dichos productos, por sobre todas las cosas, cumplan con las normativas internacionales vigentes, como el reglamento 178/2002 sobre trazabilidad o el 1935/2004 para materiales y objetos que entren en contacto con alimentos (orientado a los envases); ambos para el mercado europeo.
Si el destino de sus exportaciones es el mercado norteamericano deberá cumplir con la Ley de Bioterrorismo, vigente desde 2003, o la Ley de Sanidad de Alimentos para poder ingresar al exigente mercado japonés.
Otros aspectos a tener en cuenta son que el producto cuente con el etiquetado nutricional obligatorio, códigos de barra y por supuesto, saber la procedencia del producto a ingerir. Es por ello que cada día la trazabilidad viene tomando mayor importancia para el sector exportador, depende de usted, si de ahora en más lo quiere ver como una exigencia o una oportunidad.